IESE Business School
Blogosfera
IESE Publishing
IESE Business School
Blogosfera
IESE Publishing
English
Login
English
ÁREA DE CONOCIMIENTO
Análisis de decisiones
Conocimiento y comunicación
Contabilidad y control
Dirección estratégica
Economía
Ética empresarial y RSC
Finanzas
Gobierno corporativo
Iniciativa emprendedora
Innovación y cambio
Liderazgo y dirección de personas
Marketing
Servicios y operaciones
Tecnologías de la información
TIPO DE MATERIAL
Artículos y opiniones
Casos
Notas técnicas
Libros
Intercambio de conocimientos
Documentos de investigación
Estudios e informes
Vídeos y podcasts
Marketing
Los cinco pasos para desarrollar con éxito un nuevo producto
Considerando que la tasa de
fracaso en el lanzamiento de nuevos productos
puede alcanzar el
90%
en algunos sectores, es inevitable cuestionarse qué falla en esas propuestas y cómo poner remedio.
Según la nota técnica
El proceso de desarrollo de nuevos productos
, del profesor del IESE
Juan Manuel de Toro
, el secreto del éxito está en seguir
cinco pasos básicos
.
1. Identificar la oportunidad y generar la idea
El punto de partida del proceso de desarrollo de un nuevo producto o servicio es identificar y analizar las
necesidades existentes
de los clientes actuales y potenciales, su
grado de satisfacción
hacia la oferta de la competencia, sus
hábitos de consumo
, las posibilidades tecnológicas para mejorar lo existente y las
limitaciones u oportunidades
que presenta el entorno para el desarrollo de novedades.
Una de las claves del éxito de esta etapa radica en la elección de las
personas responsables
, que deberían tener una dilatada experiencia y visión estratégica de la compañía, los competidores, los clientes y los proveedores.
El ejemplo de algunos pioneros de la innovación moderna puede ser ilustrativo. Por ejemplo, el método de
Ferran Adrià
, responsable de
El Bulli
, para generar nuevas ideas contemplaba la eliminación de barreras entre los diferentes grupos del equipo creativo; la implicación de
Adrià
y el resto de directivos en el proceso; la definición de unos objetivos y unos plazos a cumplir; la asignación de recursos económicos, temporales y humanos necesarios; y la documentación y archivo de los datos obtenidos para su posterior análisis o consulta.
2. Dimensionar la oportunidad
Juan Manuel de Toro apunta que, una vez recopilada toda la información sobre las tendencias del mercado y planteados los objetivos, el siguiente paso es dar
forma a la idea
. Identificar el segmento o segmentos a los que irá destinado el producto y pronosticar a futuro los comportamientos de compra en la medida de lo posible.
Mediante herramientas de desarrollo de nuevos productos, como el
modelo Kano
, y técnicas para discriminar necesidades, como el
análisis de diagramas de afinidad o la voz del consumidor de Glenn Mazur
, se identifican y se agrupan las necesidades según los criterios estratégicos establecidos.
3. Desarrollar el concepto
En esta etapa del proceso se establecen las líneas o características que deberá cumplir el producto para satisfacer las necesidades del cliente y diferenciarse de la competencia.
Para ello, se recomienda contar con las
opiniones de usuarios líderes
que puedan predecir las necesidades futuras del mercado. Y que el equipo que lo lleve a cabo sea
multidisciplinar
: personal de
diseño y producción
que conozca las exigencias técnicas; personal de
marketing
que defienda las necesidades de los clientes, y personal de
finanzas y dirección
que determine la disponibilidad de fondos para el diseño y la fabricación del nuevo producto.
Una vez que se han desarrollado todos los conceptos relacionados, el equipo debe centrarse en las características y conceptos que más satisfagan a los clientes, que más se diferencien de la competencia y que tengan un mayor potencial de rentabilidad.
4. Realizar el concepto y probarlo
El paso siguiente es
crear un prototipo
y evaluar si cumple los
objetivos esenciales
:
Ofrecer una serie de beneficios que satisfagan las necesidades del cliente.
Llegar al mercado en el momento oportuno, ni demasiado pronto ni demasiado tarde.
Ser eficientes en los costes de desarrollo y fabricación.
Mantener una relación equilibrada entre el coste de lanzamiento y la capacidad del producto de generar rentabilidad.
Y tener en cuenta que invertir en la
reducción del coste
puede redundar en un aumento de la rentabilidad. Reducir el precio puede hacer subir la cuota de mercado, lo cual redundaría en unos costes de distribución más ajustados que desincentiven a la competencia.
5. Posicionar y lanzarlo
Con el producto ya definido y estudiado en profundidad, el siguiente paso consiste en definir su
posicionamiento estratégico
. En definitiva, decidir cómo queremos que lo perciba el cliente potencial al compararlo con otras alternativas, teniendo en cuenta el factor económico, el funcional y el emocional.
Tradicionalmente, advierte
Juan Manuel de Toro
, se resaltaban los aspectos funcionales de los productos. Sin embargo, hoy en día, constituye una fuente de diferenciación
poco sostenible a largo plazo
, dado que los avances tecnológicos permiten una rápida reacción de la competencia.
Cuando los precios y las
prestaciones son muy similares
, la diferenciación proviene fundamentalmente del tercer factor, el emocional, tal y como pone de manifiesto la relevancia que tiene hoy en día la
imagen de marca
, la comunicación y los denominados atributos intangibles.
Ya hace mucho tiempo que
Coca-Cola
, por ejemplo, dejó de focalizar la estrategia publicitaria en sus propiedades para autoproclamarse como la bebida de la felicidad.
Artículo basado en:
El proceso de desarollo de nuevos productos
Año:
2016
Idioma:
Español